Partiendo del eco de las informes recientes donde se afirman que un gran porcentaje de videojuegos publicados antes de 2010 no pueden comprarse en tiendas físicas o digitales, Albert centra la atención en la importancia de preservar el videojuego como bien cultural. Para ello cuenta con la opinión de varios expertos, entre los que se encuentran Óscar Nájera y Eduardo Cruz.

“Quien más se ha preocupado de la preservación del videojuego es la propia comunidad de jugadores.”

Óscar Nájera, Associació A.R.C.A.D.E., Recreativas.org.

El artículo recalca han sido los propios entusiastas los que se han encargado de evitar la desaparición de muchos juegos, ante el desinterés de las compañías propietarias por conservarlos.

Destaca por ejemplo el caso concreto de la máquina recreativa El fin del tiempo de Niemer, y el esfuerzo del equipo de Recreativas.org para preservar un juego que, tal como reconoce Eduardo Cruz, “Es una máquina que hasta que no vimos con nuestros propios ojos no teníamos claro si había existido realmente o si solo era un anuncio de una revista”.

“Si el videojuego es cultura como bien apuntan ahora los políticos, hay que asegurar que esa cultura vaya a perdurar en el tiempo.”

Eduardo Cruz, Associació A.R.C.A.D.E., Recreativas.org.

Por su parte Eduardo Cruz insiste en se debería actuar desde ya para asegurarnos de que, dentro de unos años, cuando estos juegos pasen a dominio público, sean obras recuperables.

El reportaje fue publicado el pasado domingo 3 de septiembre en la sección de Cultura en la edición impresa de La Vanguardia, y en versión digital con el titular «Videojuegos tan recientes y ya están en peligro de extinción», el cual hemos archivado en la sección En los medios.

Enlaces

Videojuegos: tan recientes y ya están en peligro de extinción, en lavanguardia.com.